¿Quienes somos?


Somos un grupo de católicos de la Iglesia de Málaga del Movimiento de Cursillos de Cristiandad.
Un Movimiento de Iglesia 
El Movimiento de Cursillos de Cristiandad es un movimiento eclesial de difusión mundial que actúa en el interior de la Iglesia Católica, sintiéndose llamado a participar activamente en la gran misión de la evangelización. Su finalidad apostólica consiste en llevar la fe cristiana a los diferentes ambientes de la vida.
¿Dónde y cuándo nació?
El Movimiento nació en España, concretamente en la isla de Mallorca, entre los años 1940 y 1949.Numerosos laicos y algunos sacerdotes, iluminados por el Espíritu Santo, descubrieron muy claramente el hecho de que también los laicos, en virtud de los sacramentos del Bautismo y la Confirmación, desempeñan un papel activo en la evangelizacion.
¿Cómo se difundió?
Cursillos se difundió por toda España y desde ahí a los países americanos y después a los cinco continentes.
La Evangelización en forma comunitaria
La característica del Movimiento de Cursillos es principalmente la de compartir una fe vivida para difundirla.Es de suma importancia la cooperación armónica entre laicos y sacerdotes.Cada cual tiene su función especifica, pero todos conjuntamente se preocupan por alcanzar el mismo objetivo: La evangelización como fermento en los ambientes.
¿Cuál es el método?
La finalidad de este objetivo se alcanza mediante una específica metodología kerigmática, que consta de tres tiempos. Precursillo, Cursillo y Postcursillo.Los temas y los contenidos de los tres días del Cursillo son iguales en todo el mundo.Son los contenidos fundamentales del Credo de nuestra fe católica: Jesucristo, la Gracia, los Sacramentos, la Iglesia, el apostolado, la profundización de las verdades de fe, las experiencias de la fe.
¿Cómo se estructura el Movimiento?
La responsabilidad principal se confía a los Secretariados Diocesanos y a los Secretariados Nacionales.Entre unos y otros se situan, en nuestro país, los Grupos Interdiocesanos.
¿Tiene reconocimiento oficial de la Iglesia?
El Movimiento de Cursillos cuenta con la aceptación y el reconocimiento pastoral a nivel mundial de importantes pastores de la Iglesia católica.Muchísimos cardenales y obispos de todo el mundo acogen la colaboración del Movimiento. Los Papas de los últimos decenios han expresado repetidamente un particular aprecio por el Movimiento de Cursillos.
¿Qué aporta Cursillos a la Iglesia?
Este instrumento de evangelización ha creado multitud de núcleos de cristianos que viven y conviven lo fundamental cristiano y se esfuerzan por fermentar de Evangelio los ambientes. Miles de cristianos renovados en un Cursillo de Cristiandad, o que tuvieron en él su primer encuentro con Jesucristo, han revitalizado instituciones y movimientos, ocupan puestos de responsabilidad en Iglesia, han logrado animar cristianamente los ambientes donde viven…




                                                                                                                                                 
Breve historia de un largo camino.     
                                                             
El Movimiento de Cursillos de Cristiandad nació en Mallorca, entre los años 1940 y 1949, a través de un grupo de jóvenes que, iluminados por el Espíritu Santo, descubrieron que el cristiano -en virtud de los sacramentos del Bautismo y la Confirmación- está llamado a desempeñar un papel activo en la evangelización.
Este grupo de amigos, como preparación de una peregrinación a Santiago de Compostela, elaboró un método para ayudar a un cambio profundo en la vida ordinaria. Nació así el cursillo de tres días, que se repitió cada año, y al que se invitaba a participar tanto a los alejados de Dios y de la Iglesia como a cristianos practicantes. De cada cursillo surgían pequeños grupos que se reunían después para ayudarse mutuamente en la formación, la oración y la acción.
Los efectos evidentes de estos grupos de “cursillistas” hizo que el obispo de Mallorca, Monseñor Juan Hervás, apoyase eclesiásticamente este nuevo movimiento y rápidamente se extendió: primero por toda la isla, después a todo el país y a principios de los años 50 a Latinoamérica y Centroamérica. A principios de los años 60 se extendió también por los países anglófonos.

Juan Pablo II siempre apoyó los Cursillos de Cristiandad y alentó el proceso de discernimiento que lo ha llevado a ser reconocido oficialmente en la Santa Sede por el Consejo Pontificio para los laicos. Hoy día está presente en más de 70 países con dicho respaldo e impulso eclesial.

   Preguntas frecuentes

1. ¿Para quién es el cursillo?
Es para todos aquellos que quieran profundizar en sí mismos,  en la vida y en la fe; es tanto para personas creyentes como no creyentes, pero con inquietud espiritual y apertura de corazón, sea cual sea su forma de pensar y sentir.
Quizás.... sea para ti,  Quizás en el cursillo encuentres alguna pista...,  Tú mism@  
2. ¿Qué supone hacer el Cursillo?
Supone una experiencia tremendamente gratificante que ayuda a iluminar el camino que tenemos que recorrer. Quien lo ha vivido suele decir que han sido tres días que han marcado su vida para siempre.
3. ¿Cuál es la novedad del Cursillo?
Proclama una Buena Noticia, lo sustancial de la fe, de forma testimonial, cálida, alegre y jubilosa. Más que demostrar grandes verdades, muestra vidas que han sido tocadas por el Amor de Dios. Encaja muy bien con la forma de ser del hombre y la mujer de hoy.
4. …y después del Cursillo ¿qué?
Partiendo de la libertad y el respeto a las opciones personales, se ayuda a descubrir y desarrollar la vocación especifica a la que cada uno es llamado, a encontrar el lugar donde realizarse como persona íntegra en los distintos ambientes de nuestra sociedad.
A los que están integrados en alguna comunidad, se les anima a volver a ella con ánimo renovado. A los que no están en ningún grupo o comunidad, se les ofrecen medios para fortalecer su vida cristiana.




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